jueves, 3 de enero de 2008

Tardanza

Inherente a nuestra condición humana, no al modo de pensar colombiano como a veces creemos los que dignamente llevamos ese gentilicio, las tardanzas siempre van un paso adelante del que nuestro reloj mantiene.
Corríamos por los pasillos del centro comercial con mi amiga Leidy T, buscando las zapatillas con las que ella había soñado durante los últimos meses y que deberíamos disputarlas en franca lid con todos los parroquianos que también corrían y también tenían los mismos sueños disfrazados de fashion; las tiendas al igual que el tiempo se nos terminaban, y calor y la sed se hacían mas fuertes y mis esfuerzos por no sudar eran infructuosos hasta que, al girar en la esquina de un largo corredor, un chico en una dirección y velocidad equivalente a la mía y con el tiempo suficiente para evitar la colisión, me regaló una amplia sonrisa con sus treinta y dos dientes perfectos y con esa alegría genuina de a quien la casualidad enfrenta a una vieja historia. Era Santiago; Santiago acompañado de un arsenal de recuerdos que disparó certeramente con su sonrisa fabulosa; Santiago, de quien había escrito mi anterior post; Santiago, quien seguía protagonizando mis ridículos sueños de amor en blanco y negro. Era Santiago, en el mortalmente nostálgico 31 de Diciembre.
El cielo desapareció de mi escenario, las piernas de jabón, la boca mas seca que antes y las palabras que no fluían hicieron de este cristiano una presa fácil para el amor encerrado durante un difícil 2007.
-Hola, ¿Qué mas? – fue todo lo que pude articular desde el fondo de mi abismo, donde encajé una débil sonrisa y estiré mi mano como un gesto de caballerosidad sin fuerzas.
Santiago la estrechó con vigorosidad y me lanzó de regreso un Feliz Año con un tono carnavalesco y alegre, como siempre lo hizo.
- Nada, aquí, feliz de verlo después de tanto tiempo.
- Hmmm si, mucho tiempo, mas de un año
- Un año y dos semanas – dije, antes de recibir la bofetada que el orgullo le dio a mi corazón. El parapeto de cadavederes de sueños y sonrisas forzadas cayó ante la evidencia de que sabía exactamente el tiempo de ausencia. Había tardado menos de diez segundos antes de mostrar la debilidad que vestía por las últimas 54 semanas. ¿Acaso no podía fingir desinterés? No, por poco y le entrego un calendario marcado con crucecitas por cada día que no le he visto; por poco y le escribo en la pared las razones para quedarse al lado de la única persona que verdaderamente lo ha amado.
Mi pasado tarda mucho en hacerse a un lado. Mi presente tarda mucho en ataviarse de una linda sonrisa. Mi futuro tarda mucho en recompensarme por aquella viejecita que alguna vez ayudé a cruzar la calle.
Santiago se despidió y se fue, sin saber que me dejaba en la mitad de un desierto emocional, aunque a decir verdad, ese había sido mi hogar desde hacía 379 días. Mi cerebro no procesaba las preguntas sobre color, forma y diseño que Leidy T formulaba; mis piernas aun eran una estructura gelatinosa incapaz de sostenerme y las palabras se habían limitado al igual que la sonrisa. Pocos salen con vida al enfrentarse a su propia criptonita, y aunque débil, tenía el privilegio de haber librado un, poco digno, pero buen combate personal.
Horas más tarde el año acabó. Leidy T cenaba tranquila luciendo unas hermosas zapatillas negras. Mi mamá explicaba a los niños el por qué les había decomisado la pólvora que habían comprado clandestinamente. En algún lugar alguna pareja se daban un primer beso de amor. En un rincón de mi casa mi pasado, mi presente, mi futuro y yo tardábamos mucho en prepararnos para empezar un nuevo año donde los sueños sean más realistas… y donde la buena fortuna no tarde mucho en tocar a la puerta.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Querubin:

Estas situaciones aunque dificiles, dolorosas, nos hacen mas fuertes, podemos ver el mundo de mejor manera con el paso del tiempo.

Al final todo sera un recuerdo que nunca volvera, todo pasa en la vida.

La criptonita no te mato, pero de hecho eres ahora un poco mas fuerte.

dany dijo...

¿Será que todo pasa en la vida?
No sé, yo sigo amarrado a ciertos recuerdos. La evocación de ciertos besos, de ciertos momentos íntimos me siguen excitando. Y si hoy me reencontrara con los protagonistas de esos momentos, me moverían el piso, sin dudas.
Te mando un abrazo sin kriptonita, angelito oscuro.

AnCris dijo...

Todo lo que no nos mata, nos hace más fuertes, eso para empezar...
Y luego ¿qué decirte? Cuando estamos en medio de historias que nos calan hondo, desgraciadamente el tiempo tiene la respuesta y uno sólo tiene que seguir adelante como mejor pueda. Hasta que un día deja de doler tanto, deja de importar tanto... pero puede llevar mucho tiempo ¿de qué depende? creo que de la vida que caminemos...
Lo que quiero decir es que sí, pudiste saber exactamente el tiempo sin verlo y parecería que no sucedió nada más, pero... en esas 54 semanas ¿cuántas cosas más has vivido? Sé que mucho más, porque estás aquí, porque tenés amigos que te has ganado de todos lados y, como dice el ángel burgalés: porque llegará el tiempo de juntar las cerezas. No es Santiago quien debe saber que no ha sido lo único de tus días, sos vos quien debe sentirse bien con lo vivido.
Lo demás, ya llegará.
Un beso Grandísimo!
Ana

JP dijo...

Primiparos!!!

Eso es lo que tienes, fisica primiparada... A ver, siendo sinceros quiero que me digas una cosa. Para que diantres tienes esas alas si no las usas en ocasiones como esa?.

No digo que salgas volando como las palomas espantadas... Creeme, bien usadas esas alas protejen mejor que cualquier escudo.

Primiparo!!! eres un primiparo terrible!!! a tu galaxia le hacen falta cosas. No digo que deba ser un emporio militar y expansionista como el mío... pero carajo!!!

Me gustó este post.

CRISTINA dijo...

Suerte para el 2008.

Encontrarás otro amor, ya verás...y Santiago será un recuerdo.

Rosa dijo...

El color del final de la noche, me pregunta dónde fui a parar dónde estas, que esto solo se vive una vez, donde fuiste a parar dónde estas.
Me preguntan también las estrellas, me reclaman que vuelva por ella. Ay que vuelva por ella.
Pero fueron las mismas estrellas que un dia marcaron mis manos y apartaron la flor, esa flor de mi vida.

No se va no se olvida nada.

Una rosa que no floreció, pero que
el tiempo no la marchita,una flor prometida a un amor que no fue pero que sigue viva. Y otra vez el color del final de la noche. Me pregunta dónde fui a parar, que esto solo se vive una vez , dónde fuiste a parar donde estas.

Esta es una canción de "Bacilos" (no exactamente en ordén, ni completa), que es y siempre será una de las más hermosas que he escuchado y corresponden a un momento de mi vida en que como dice..."una rosa que no floreció"... siempre que la escucho él vuelve a mi lado, este dónde este... y... olvidar por completo es imposible. Y recordar, con una sonrisa aquellos días, sin lágrimas no creo que pueda ser malo, es como abrir una ventana para que el aire entre de nuevo y se lleve todo lo amargo y solo nos deje... una mezcla de miel y café.

Así es la vida mi ángel y pa adelante que empieza un año nuevo, 365 días para hacer de nuestras vidas lo que deseamos.
UN AÑO MARAVILLOSO CON TODO MI CORAZON

Vetado para el amor dijo...

HOLA ¡FELIZ AÑO 2008!... LO IMPORTANTE ES QUE EL SUSODICHO NO SE HAYA DADO CUENTA DEL INFARTO EMOCIONAL, QUE SE LE VA A HACER, TODOSTENEMOS EL CORAZONCITO ASI SEA MEDIO EXPUESTO COMO EL TUYO O MEDIO CONGELADO COMO EL MIO... PERO CORAZONES AL FIN Y TODAVIA LATEN... ABRAZOS...

Monchis dijo...

Hola Dark,

Yo nunca he dejado de querer a los hombres a quienes les he entregado mi corazón... sin embargo la distancia y el tiempo van transformando el sentimiento y terminamos recordando sin dolor.

HA pasado un año... has un esfuerzo por cerrar esa puerta, solamente en ese momento te darás a ti mismo la oportunidad de abrir otra.

La gran paradoja consiste en que el dolor que se siente por el amor frustrado pierde su brillo cuando aparece una nueva ilusión en el horizonte y caemos en la cuenta del tiempo perdido llorando por lo que se fué.

Un abrazo,